La travesía del Pirineo entre Saint Jean Pied-de-Port y Roncesvalles por la llamada Ruta Napoleón es probablemente la etapa más dura que puede hacerse en todo el Camino Francés. La entrada a Galicia por el Cebreiro es dura pero no se salva el desnivel que se salva en ésta, concentrado en muy pocos kilómetros. En 15 km se ascienden unos 1500 m, una pendiente media del 10%, en parte por pistas asfaltadas y en parte por senderos pedregosos o pistas de tierra.
Por todo ésto, seguramente no es la mejor forma de empezar, sin llevar ni un día de rodaje, pero sabemos también que es de las etapas más bonitas de todo el Camino y no hemos querido perdérnosla. Allá vamos y veremos que pasa.
Salimos temprano de Saint Jean a través de sus calles empedradas (mejor dicho de «la calle» empedrada porque el pueblo se articula alrededor de prácticamente una sola calle). Sin poder ni calentar, nada más salir del pueblo empieza una ascensión constante. Los primeros 4 o 5 km son de asfalto y enseguida nos elevamos sobre el fondo del valle que aparece cubierto de niebla. Una estampa preciosa.
Después de pasar el albergue Huntto, en el km. 5, el Camino deja el asfalto para seguir un sendero a ratos embarrado y a ratos pedregoso. Ha sido lo más duro del día. A partir del kilómetro seis se suben casi 400 metros en 3 km por terreno bastante malo. Aquí hemos tenido que empujar la bici en algunos momentos.
Siempre subiendo llegamos al Refugio Orisson donde nos unimos al montón de peregrinos que recuperan fuerzas sentados en su terraza.
Una vez rehidratados, porque además hoy hace muchísimo calor, seguimos camino. El paisaje es cada vez más alpino, con los típicos prados de alta montaña. Yo estoy reventado y Blanca tira y tira. Una vez que he parado a hacer una foto y ella ha seguido, unos caminantes que venían por detrás han comentado entre ellos «joder la niña, como le pega a la bici…»
En algunos momentos había que empujar pero la pendiente no era tan fuerte como en los primeros kilómetros del día. El paisaje seguía precioso.
En el collado Bentartea dejamos Francia para entrar en Navarra. Desde allí, 5 km por una pista entre árboles nos llevan al punto más alto de la etapa, el collado Lepoeder, de 1410 m, ¡ya no hay que subir más!
Un rápido descenso entre bosques nos deja en Roncesvalles donde llegamos exhaustos pero muy satisfechos. No ha estado nada mal para ser el primer día y nos quedamos aquí a descansar toda la tarde y dormir en su albergue, situado dentro del conjunto monumental.
Balance del día: 25,9 km con 1503 m de desnivel acumulado.
ole ole! habéis empezado por todo lo alto!
Hola Sonia soc la Blanca. Realment era moooolt alt, però va valer la pena. 😘😘❤️❤️
Ole Ole oleeeee, esa sister super crack como le da a la biciiii❤️
Jota y Blanca, muchísima suerte en esta aventura, disfrutad muchísimo, desconectad con estos maravillosos paisajes y sobretodo, haced hasta donde lleguen vuestras fuerzas, ook???
Un besazo, os seguiré cada día!!!!
Gracias, un beso de parte de los dos