En Galicia no hay etapas fáciles, así que, aunque sean los últimos kilómetros hasta Santiago, todavía nos esperan unos cuantos «altos» rompepiernas y muchas preciosas corredoiras por recorrer.
Todo el día es una sucesión de pistas rurales, caminos por bosques, mayoritariamente de eucaliptos, y pequeñas carreteras locales. Los kilómetros pasan rápido aunque las ansias de llegar hacen que parezca que nunca se acaban.
Algunos altos son especialmente duros como el de Lavacolla. A estas alturas ya no tenemos ganas de «cuestas» y lo que queremos es llegar. Además, igual que ayer, el Camino está abarrotado de gente, caminantes y bicis, y se hace difícil avanzar en los tramos más estrechos.
El último alto que subimos es el Monte do Gozo. En todas las guías pone siempre que el nombre viene del «gozo» que provocaba en los peregrinos ver desde este monte las torres de la catedral de Santiago por primer vez. La verdad es que yo por mucho que miro no he visto nunca Santiago desde aquí. Los árboles tapan la vista. Quizás en la Edad Media no había árboles, ¿quién sabe? En todo caso, el gozo inmenso que nos produce es que es el último lugar al que hay que subir. Desde aquí todo es bajada hasta la Plaza del Obradoiro.
La entrada en la ciudad no es fácil y no está demasiado bien resuelta para las bicis. En la parte moderna es difícil ir por las aceras por la gente que hay y por la calzada hay muchísimo tráfico. Y cuando entramos en la parte histórica el Camino va por una calle peatonal prohibida a las bicis y, aunque hay un recorrido alternativo señalizado para nosotros, las indicaciones no están demasiado claras. En todo caso, poco a poco y con el corazón acelerado conseguimos llegar a la Plaza del Obradoiro. La entrada es caótica porque hay un millón de turistas pero por fin estamos aquí, ¡lo hemos conseguido! Es un momento intenso que solo pueden comprender los que lo han vivido. Como tantos otros de los que llegan a esta plaza, nos abrazamos, reímos, lloramos…
Es el final de dos semanas intensas y emocionantes. Hemos compartido momentos duros, momentos de risas y momentos de charla más reflexiva. Una gran experiencia. Dice un proverbio africano: «las huellas de las personas que caminaron juntas nunca se borran». Espero que si has ido en bici también se aplique y que el recuerdo de estos momentos compartidos nos quede a los dos para siempre. Gracias Blanca por haberme acompañado.
Balance del día: 53,8 km con 1065 m de desnivel positivo acumulado
Total desde Saint Jean Pied-de-Port: 817,7 km con 12967 m de desnivel positivo acumulado
Enhorabuena!!!! Blanca eres una campeona… y Juan Ramón un padrazo. Lo que me da pena es que ya se acabó el viaje. Benvidos a Galicia y ahora a disfrutar con un pulpito, un marisquito, un albariño. Besos
Gracias Mónica. Ha sido fantástico. Un abrazo
Acabo de llegar de vacaciones y he visto en mi correo los avisos de actividad en tu blog. En primer lugar enhorabuena por tu tercer Camino y por haberlo hecho con Blanca. En segundo lugar envidia, sana pero envidia, yo no he conseguido convencer a ninguno de mis dos hijos para que se embarquen en esta aventura- También tengo dos como tú y la mayor también se llama Blanca (17) casualidad eh?. Al ver las fechas en que lo realizaste he comprabado que llegaste a Santiago dos días antes que yo, que hice mi segundo Camino con un amigo desde Sant Joan, pasando por la variante del Camino Castellano-Aragonés. Ha sido una lástima, me hubiera gustado coincidir con vosotros y saludaros. Excelente crónica y comentarte que nosotros seguimos como vosotros el Camino a pie, incluso las opciones de la Vía Trajana, la de Villar de Mazarife, el descenso de Foncebadón, mucho más bonitas que las otras opciones , y la de Samos. Solo nos hemos saltado el tramo de Camino de ascenso a O Cebreiro, lo hicimos por carretera y me arrepiento. Gracias por el relato y felicita a Blanca por ese excelente Camino, tanto por conseguirlo como por lo bien que monta en bicicleta. Buen Camino
Saludos
Jose
Hola Jose, muchas gracias por tus comentarios. No he podido contestarte antes porque estaba de vacaciones. Felicidades por tu segundo Camino. Yo siempre digo a todo el mundo que esto engancha, si lo pruebas una vez, repites seguro. ¿A qué te refieres con la variante del Camino Castellano-Aragonés? ¿No es el camino que va de Zaragoza a Burgos pasando por Soria? ¿Qué tramo hiciste?
Saludos,
Juan Ramón
Si, el Castellano-Aragones es el que va de Zaragoza a Soria, pasando por Burgos. Lo hicimos entero, desviándonos para pasar por el Cañón del Río Lobos. Está pero señalizado, pero vale la pena por los paisajes que pasas y por la soledad
Te pongo mi blog por si quieres echarle un ojo sobre todo a las fotos.
http://santjoansantiago.blogspot.com.es/
Saludos.
Jose
Grande y bonita gesta… si señor.
Y también la tuya… Gracias por tus comentarios.
Hola Juan Ramon!
M’ha encantat el relat. Enhorabona a tu i a Blanca, encara que ja han passat dos anys.
Este estiu vull anar amb el meu fill de 14 anys i la lectura de la teua crònica m’ha llevat algunes pors que tenia.
Per qüestions de temps sols farem des de Lleó.
Mil gràcies!
Moltes gracies! Me n’alegro molt d’haver-te ajudat. Et recomano molt que ho intenteu. Estic segur de que disfrutareu molt de l’experiència.